Un cierre volcánico para la Vuelta 2026
Según informa el medio local Atlántico Hoy, la Vuelta a España 2026 tendrá un final histórico e inédito: las últimas cuatro etapas se disputarán en las Islas Canarias, con las dos jornadas clave desarrollándose en los colosos montañosos del Teide (Tenerife) y el Pico de las Nieves (Gran Canaria). Será la segunda vez en la historia de la carrera que la competición se traslada a este archipiélago atlántico.
El precedente es lejano: en 1988, la carrera arrancó con una prólogo en Santa Cruz de Tenerife. Desde entonces, las islas no habían vuelto a formar parte del recorrido oficial. Ahora, en 2026, la historia se reescribirá con una llegada que promete emociones y un gran espectáculo deportivo en paisajes únicos.
Gran Canaria y Tenerife: protagonistas del gran final
El impulso para esta decisión vino directamente del gobierno local de Gran Canaria, que propuso a Unipublic —organizadora de la Vuelta— realizar el cierre de la carrera en el archipiélago. Aunque al principio existían dudas en Tenerife por los altos costos (se estiman alrededor de seis millones de euros), la proyección turística y mediática terminó por convencer a las autoridades.
El enfoque comercial está claro: atraer miradas de países estratégicos como Francia, Bélgica, Alemania, Eslovenia, Polonia y los Países Bajos. La apuesta es ambiciosa, pero también estratégica. El cierre en las Canarias no solo ofrece belleza escénica y desafíos físicos únicos, sino una vitrina perfecta para el turismo deportivo internacional.
El Teide, una cima mítica que ahora contará
La etapa final, de acuerdo con la información filtrada, terminaría en lo alto del Teide. Aunque rara vez se ha utilizado en competición, este volcán de 3.715 metros es conocido por ser una cima habitual de entrenamiento para muchos equipos WorldTour durante el invierno. Ahora, el entrenamiento se convertirá en batalla real, y el Teide en juez final.
El Pico de las Nieves, en Gran Canaria, también servirá como otro punto clave antes del desenlace, elevando aún más el nivel de exigencia en la última semana. Dos cimas, dos islas, y una gran vuelta que promete cerrar con fuego volcánico.
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